lunes, 30 de abril de 2012

¿EL FIN DEL MUNDO O EL FIN DE UNA ERA?


(La conmemoración del 13 baktun en la cultura Maya)

Por Max Araujo.

Guatemala es un país en el que conviven dos culturas mayoritarias: La maya y la mestiza. La primera formada por descendientes de la milenaria civilización maya, y la segunda, principalmente, de europeos y de mayas, por lo que las dos tienen puntos de coincidencia que les permite una convivencia relativa, aunque los mayas todavía, en este siglo 21, sufren de racismo, exclusión y discriminación.

Los mestizos o ladinos heredamos un sistema colonial y monocultural impuesto por 3 siglos de colonización española, de la que son beneficiarios, aunque esto es relativo, quienes detentan el poder económico y político, que son una minoría en los 14 millones de habitantes del país.

Es en este contexto que surge la conmemoración del 13 baktun, que para el pueblo maya significa la terminación de una era y el comienzo de otra. Este pueblo tiene una cosmovisión extraordinaria. Las cuentas del tiempo y de sus distintos calendarios que rigen su vida (entre ellos los de la cuenta larga que significan periodos, uno de veintiséis mil años y otro de cinco mil doscientos años) son parte de esta cosmovisión.

Según la cuenta del tiempo que hacen los mayas, una era de cinco mil doscientos años está finalizando este 21 de diciembre, pero lamentablemente este acontecimiento ha sido mal interpretado por algunas personas, y que algunos “agoreros” han utilizado para anunciar el fin del mundo.

Estas son, a grandes rasgos, las explicaciones sobre la finalización de una era y el comienzo de otra. A la explicación de estos calendarios se suman los datos científicos y precisos sobre una alineación entre el sol, la luna y Júpiter que sucederá el 21 de diciembre de este año, y que, según algunos expertos, provocará un cambio en los polos magnéticos de la tierra que a su vez generará una alteración en los hemisferios cerebrales de los seres humanos, ya que todo lo que existe en nuestro planeta está influenciado por lo que sucede en el cosmos, pues somos parte de un todo.

Pero ¿por qué y para qué escribo este texto en un blog donde se discute sobre la pobreza, extrema pobreza y de derechos humanos?

Mi respuesta es sencilla:
Porque optimista que soy, no pierdo la esperanza que más tarde o más temprano se construirá un mundo mejor, en paz, con justicia social, en el que desaparecerán las exclusiones , los racismos y la extrema pobreza.

Y da la casualidad que debido al cambio de era que se dará a partir del 21 de diciembre de este año, según la cosmovisión maya, y al cambio en los hemisferios cerebrales del ser humano, un mundo nuevo se construirá. Los cambios en los hemisferios cerebrales tienen que ver concretamente con la bondad, la justicia, la armonía y el respeto. Comenzará entonces una era de cinco mil doscientos años en la que se terminará la injusticia social, la extrema pobreza y muchos de los males actuales. En ese sentido habrá paz, justicia, tolerancia, armonía y respeto con la naturaleza y con los otros seres vivos.

Si esto es así ¡bienvenido sea el cambio de era!, porque finalmente el mundo cambiará para bien.
¡¡ Que hermoso!!, poco a poco desaparecerán muchos de los males sociales actuales.¿ Ficción o realidad? Yo me aferro a la segunda, porque sigo soñando con un mundo mejor.

Guatemala, 27 de abril de 2012

lunes, 23 de abril de 2012

El encuentro cruza las fronteras


Peritaje sobre Violencia y Paz

En el 2008 en ATD Cusco, nos unimos al peritaje participativo sobre “La violencia que sufren los más pobres y de qué paz son ellos portadores” que llevó a cabo el Movimiento ATD Cuarto Mundo en varios países del mundo. En Cusco creamos un pequeño grupo que se reunía regularmente; durante los primeros encuentros con los participantes (personas que viven en extrema pobreza) entrar en el tema de la Violencia no fue fácil, fueron encuentros tras encuentros y poco a poco que fuimos construyendo un camino donde reinara la confianza y el compartir; yo sentí en todo este tiempo que sin esta confianza no habría sido posible alcanzar todo el conocimiento y reflexión que aportaron los participantes en este peritaje.


La Educación

Tuve la oportunidad de formar parte de este grupo y la suerte de poder conocer los esfuerzos que estas personas hacen cada día para afrontar la violencia y aportar paz en sus comunidades. En un principio no era fácil para mí. Nuestro desafío era abordar el tema de la violencia más allá del maltrato físico, lo cual no era evidente ya que apenas se mencionaba la palabra Violencia, caíamos de inmediato en el maltrato físico, que sí es violencia pero queríamos ir más allá.

Recuerdo que uno de los participantes decía: “cuando no reciben a mi hijo en la escuela y lo echan, eso es violencia”...


La esperanza

Y cuando hablábamos de la paz, otro persona nos decía “yo, cuando alguien está enfermo en mi comunidad, le visito; la paz para mí es estar al lado de alguien que no tiene quien le visite”


Ellos nos ignoran

Fue así que poco a poco fuimos construyendo un compartir y conocimiento mutuo: violencia es no ser tomado en cuenta, ser humillado, discriminado.


Vivir todo este proceso ha sido una verdadera escuela para mí y no es fácil explicar en cortas líneas todo lo que aprendimos y vivimos a cerca de cómo la violencia puede anular los Derechos Humanos de las personas.

En setiembre del 2011 supimos que algunos delegados nuestros iban a participar de un Coloquio Internacional en Francia, que recogió la experiencia y conocimiento trabajado en los distintos grupos en cada país. En octubre, nuestra delegación estaba compuesta por dos personas que viven en extrema pobreza, otra que trabaja en una institución que apoya a los estibadores en el Cusco y yo que acompaño a los delegados como voluntario permanente de ATD.

Finalmente llegamos al Coloquio en el que distintos actores de la sociedad (gente que vive en extrema pobreza, universitarios, académicos y autoridades políticas) se reunieron usando el método “cruce de saberes”. Un método que es muy interesante pero que no todos lo vivieron con la apertura que se necesitaba para crear un verdadero cruce de saberes, lo sentimos así especialmente por parte de los participantes académicos.

Al igual que otros, espero que los resultados de este Peritaje sirvan de base a la hora de tomar decisiones en instancias internacionales y hagan eco en la sociedad.

Guillermo Díaz Linares
desde Cusco - Perú


* Inspirado en el peritaje sobre violencia y paz, Guillermo Díaz Linares creó más de una decena de obras que reflejan la experiencia vivida con los participantes (del Cusco). Sus obras fueron expuestas durante el Coloquio "La miseria es es violencia: Romper el silencio", evento con el que culminó dicho peritaje..



 

lunes, 16 de abril de 2012

Movilización

Una gran mayoría de vecinos de la colonia* estaba movilizada. Las señoras preparaban comida para las familias afectadas. Muchos señores, varios jóvenes y algunos niños no dejaban de sacar carretillas llenas de cenizas y de cosas calcinadas de todo lo que quedaba de las casas. Muchos jóvenes que trabajan reciclando o directamente en el relleno sanitario estaban también apoyando.

Un pastor propuso dar ropa. Personas de la Municipalidad, la CONRED (Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres), vinieron para proponer un alojamiento temporal, víveres y algunas láminas. Una Asociación que está al lado de la colonia y que trabaja con muchas familias, estaba también muy pendiente para apoyar y ver las necesidades de las personas afectadas.

Este era el panorama que se veía en una pequeña Colonia cerca del Basurero más grande de la ciudad de Guatemala. Un incendio había quemado por la noche cinco casas donde vive la familia de Glendy con quien el Movimiento tiene una relación desde hace muchos años. También hay otras familias que conocemos.

Por falta de espacio en los callejones que separan las casas, los bomberos no lograron entrar en la colonia. Así que estas familias perdieron todo.

Durante este tiempo otro grupo de amigos se estaba movilizando reuniendo cosas para apoyar en los primeros momentos y algunos otros se fueron a apoyar en la colonia por algunas horas. Ellos siguieron apoyando a todas las familias sin distinción, quitando y limpiando todo para dejar el espacio libre a la reconstrucción.

Esos y los siguientes días fuimos testigos de todos los esfuerzos, gestos de amistad y de apoyo entre cada miembro de las familias, los vecinos y otros amigos que llegaron. Al igual que otros en la colonia, los participantes del taller de reciclaje del proyecto “Trabajar y Aprender Juntos” también estaban muy afectados por lo que le sucedía a Glendy, (participante del taller) a su familia y a todos sus vecinos. Se pusieron de acuerdo para reunir cosas para ellos y juntarse al día siguiente para llevarles todo.

Cada familia comenzó a reconstruir con los palos y las láminas que les habían dado los de la Municipalidad para separar los terrenos. Con otras láminas y unos palos medio calcinados que quedaban del incendio, estaban construyendo paredes alrededor de todos los terrenos para cerrarlos y “protegerlos”.

Cuando le conté todo esto a Doña Raquel, que vive en otra zona alejada y pobre de la ciudad, ella comentó: “al final todo eso es material, lo bueno es que nadie perdió un niño porque eso es lo más duro que se puede vivir”.

Algunos días después, David el esposo de Glendy dijo: “Ahora sé que cuentan mucho para mí (refiriéndose al Movimiento) porque sé que puedo contar con ustedes.”


Marylise ROY
Guatemala Ciudad, marzo 2012

* Colonia: barrio, comunidad.

martes, 10 de abril de 2012

Hoy quiero hablar de la mujer...

De esa mujer que sueña, que sufre, que lucha, pero sobre todo de la que se esfuerza y se sacrifica y que renuncia a todo por sacar adelante a su familia.

De Ana, la madre joven que por falta de oportunidades, o de educación, o por ignorancia, ha vivido malas experiencias, que hoy la hacen sentirse señalada por la sociedad, pero aún así se siente orgullosa de ser madre;

De doña Carmen, la madre-abuela, que a pesar que las fuerzas físicas le faltan, cuida a sus nietos y es capaz de sacar fuerzas de donde no las tiene; y además se siente orgullosa de su generación;

De doña María, quien es un ejemplo puro de humildad y que también calla, perdona, ama, soporta;

De doña Beatriz, quien por amor a su familia ha tenido que renunciar a sus sueños personales;

De doña Sandra, la que va junto a su pareja a realizar tareas “duras” para ganar así el pan de cada día; corta y trae la leña para el fuego o chatarrea *;

De doña Estela, la que se involucra en cosas de la comunidad porque quiere servir a los demás;

De doña Cristina, quien sin saberlo, lleva sobre su espalda la responsabilidad de hacer una sociedad distinta, porque es ella la que educa, la que corrige pero también la que ama sin condiciones;

De doña Teresa, que envejece prematuramente, porque la responsabilidad de dedicarse a su familia es tan pesada, que le quita la juventud;

De doña Rosa, que a pesar de la enfermedad y no contar con la atención médica adecuada, se mantiene en pie;

De doña Guadalupe, quien no está preparada académicamente, aun así no le falta el valor para reclamar sus derechos y los de los demás, cuando le es posible;

De doña Lisbet, que se levanta muy de mañana, trabaja hasta la noche, y aún así le sobran fuerzas para seguir despierta;

De doña Rosario, que todavía sueña por estudiar, ir a la Universidad, aun cuando el sistema no tiene opciones para ella;

De doña Elena, que se siente orgullosa porque su hijo está en la escuela, aunque ella no tuvo la oportunidad de entrar o permanecer en ese lugar, sabe que a su hijo le es difícil avanzar, pero aún así sigue creyendo que su futuro será diferente.

De doña Virginia, que vende tortillas, comida, fruta… es criticada por muchos, pero sigue con la frente en alto;

De Laura, que vive en una sociedad que no reconoce sus derechos y a pesar de eso lucha para que su voz sea escuchada;

De doña Blanca a quien el tiempo y las dificultades le han marcado su aspecto físico, pero que aún así tiene el encanto de siempre y sigue siendo bella;

Conozco a muchas de ellas; las hay humildes, trabajadoras incansables, luchadoras, con mucha fe, amantes de la lectura, sensibles, soñadoras, jóvenes, ancianas, altas, bajas, delgadas, hermosas, morenas, blancas, pero todas con una característica común: TODAS SIGUEN EN PIE a pesar de las dificultades.

Si alguien quiere encontrar a esas heroínas anónimas, ¡yo sé dónde encontrarlas!


Elda García
Guatemala

* reciclaje de chatarra
**Los nombres que aparecen son ficticios.