Diego Sánchez
La Paz – Bolivia
Durante la semana del 17
al 20 de abril se realizó la Consulta Regional “Realizando el
futuro que queremos en América Latina y el Caribe: Hacia una Agenda
de Desarrollo Post 2015” en Guadalajara, México y en ATD CuartoMundo, como movimiento de lucha contra la miseria y por la dignidad,
no podíamos quedar ausentes de este evento.
Me di cuenta que estos
tipos de consultas o encuentros intentan reunir las voces de aquellos
a quienes siempre se los deja de lado. Sin embargo entre los más
de cuatrocientos representantes de la sociedad civil, instituciones,
organizaciones y autoridades, no encontré ni una sola persona que
efectivamente viva en situación de pobreza extrema. Aunque hubo
una gran cantidad de representantes de los pueblos indígenas de
América Latina.
No es que critique la
forma de realizar un evento de esta magnitud, porque entre los
participantes por supuesto estaban miembros del Gobierno de México y
de la ONU. Pero pienso que se debería analizar de qué manera
permitimos la participación efectiva de los más desfavorecidos, no
simplemente hablando por ellos, sino invitándoles a ser partícipes
activos de una Agenda de Desarrollo que los incluya, porque son ellos
los más interesados.
Por otra parte, entre las
conclusiones que salieron de esta consulta, se remarca que América
Latina ya no es una región de pobreza extrema, sino que es la región
más desigual del mundo, mucho más que África. Entonces a partir de
ello se está casi invisibilizando la pobreza que aún existe en
nuestra región, se está casi ignorando este cuarto mundo.
Celebramos que los Objetivos de Desarrollo del Milenio hayan
permitido que los porcentajes de pobreza y pobreza extrema
retrocedieran en nuestros países, pero aún hay mucha gente que vive
en esa situación y que necesitan ser reconocidos como un colectivo,
que necesitan ser tomados como ciudadanos con los mismos derechos que
otros.
Por supuesto se está
casi invisibilizando al gran colectivo que aún vive en miseria o
exclusión porque ellos mismos no estuvieron presentes en esta
consulta regional. Fueron otros los que hablaron por ellos,
deduciendo que sus necesidades ya están casi cubiertas porque eso es
lo que nos muestran los indicadores oficiales o no oficiales.
Pienso que si en un
encuentro de tal magnitud, como fue éste, se hubiera viabilizado la
participación de personas que viven en pobreza o exclusión, la
Agenda de Desarrollo Post 2015 podría haber tenido una mirada más
integradora, más contextualizada a las diferentes realidades de
nuestra región.
Al menos mi participación
sirvió un poco para reflexionar de qué manera intentamos cambiar el
paradigma actual de desarrollo, un desarrollo no solo económico,
sino también cultural y social, que no sea excluyente, sino que más
bien pueda tomar como ejemplo la manera armónica de desarrollo que
llevaron a cabo nuestros pueblos por muchos siglos, o lo que llamamos
en Bolivia el “suma quamaña” que significa “vivir bien”.
Somos un movimiento que
no excluye a nadie, ricos y pobres formamos parte de una misma
sociedad. En estos espacios de reflexión y toma de decisiones
debemos estar todos y no solo una parte de “todos.”
No hay comentarios:
Publicar un comentario