Una de las
soluciones a la extrema pobreza indígena, por sus características
étnicas y culturales esta en la dimensión política, de reconstituir y
fortalecer el derecho a la autodeterminación, porque ninguna cultura
debe estar subordinada a otra. La reconstitución es la organización de acuerdo a la
concepción de vida que se tiene, en el caso andino sería el bien vivir,
“Suma Qamaña”, que es el estado de bienestar, la relación de equidad
entre las personas y la comunidad, entre éstas y la naturaleza, siendo
una relación profunda de respeto y sentido por la vida misma.
Somos
parte de la naturaleza, las mujeres y hombres no sólo convivimos con
nosotros mismos, sino con todo lo que nos rodea, con el viento, el agua,
fuego, el sol, la luna, la piedra, los cerros, los animales, los
árboles, etc. Por ejemplo la piedra: “qala”, que es considerado inerte, tiene
vida, existe hembras, machos, niños y abuelos piedras, saben y sienten.
Desde la vida microscópica hasta el universo, todos los seres tienen su
lugar, nadie es superior ni inferior. Yo soy tú y tú eres
yo; pertenecemos a la cultura de la vida.
En 1854,
un gran jefe indio del pueblo Suwamish (ahora Washington), recibió la
propuesta del presidente norteamericano de venderle las tierras de su
pueblo. El jefe indio le contesto:
“¿Cómo se puede comprar
o vender el firmamento o
el calor de la tierra? Esta idea nos es desconocida ¿Qué hijo
vende a su madre? ¿Cómo le voy a vender la tierra, que es como la madre
para mí? ¿Cómo yo le voy a vender los ríos, si los ríos son la sangre
de mis antepasados?
Cada trozo de esta tierra es sagrada para mi pueblo, cada
mata brillante de pino, cada grano de arena en las playas, cada gota de
rocío en los bosques y hasta el sonido de cada insecto es sagrado a la
memoria y el paso de mi pueblo.
El aire tiene un valor
inestimable para nosotros, ya que todos los seres comparten un mismo
aliento, el animal, el árbol, el hombre todos respiramos el mismo aire”.
El aire comparte su espíritu con la vida que sostiene". (Extracto)
Maria Sandra Ochoa Ramos
La Paz - Bolivia
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